jueves, 10 de julio de 2008

A VER SI ENTENDÉS

Buscalo. Tomate tu tiempo y buscalo. Y no pares de buscarlo hasta encontrarlo. Porque si lo vas a buscar sin ganas, entonces no lo busques y quedate sin tenerlo, sin mejorar un poco tu vida.

Y cuando lo encuentres, tocalo, olelo, acaricialo, observalo, degustalo por fuera, porque lo que tenés en tus manos es quizás una de las piezas musicales de la historia del rock, más valiosa e increíble que puedas imaginar.

Abrilo con cuidado y concentrate en el booklet. Las fotos, las caras, los nombres que le corresponden a esas caras. No lo vas a poder creer. Un recital. El último recital. La despedida. El mundo nunca más los volvería a ver así. En estado de gracia. Sobre un escenario. Ardiendo. Haciéndole vivir a la gente una experiencia intransferible.

En eso que estás a punto de ver y escuchar, no hay maquillaje, ni modelo anoréxica devenida en cantante pop. Ahí no vas a cruzarte con un monito negro saltando con cara de malo jurando ser un gangsta asesino. No hay efectos especiales, ni toneladas de luces, ni pantallas de leds para realzar nada. Porque estos tipos, hace más de treinta años atrás, ya sabían que no hay nada mejor que la realidad de lo real. Y los vas a ver medio sucios y volados y felices y tristes, pero fundamentalmente los vas a sentir geniales.

Porque la genialidad si bien no puede transferirse en sí misma, es tan generosa, que permite que cualquier mortal la disfrute como a un manjar.

Y cuando hayas terminado de darte cuenta de todo lo que la suerte y el destino están por regalarte, sentate cómodo y con la certeza de que nadie te va a romper las pelotas. Acá no hay otra. Esto se ve de un saque o no se ve. Al menos la primera vez DEBE ser así. Nada de celulares, nada de mujeres, nada de hombres (si sos mujer o puto), nada de hijos, nada de nada. Otra cosa: esto no se acompaña con soda, con gaseosa, café ni mate, ni té. Esto va con whisky o vodka.

Apretá play y respirá hondo. No sabés lo que daría por estar en tu lugar. Por volver a ser desvirgado de la misma manera. No saber lo que viene, lo que me espera. Por volver a ingresar en un terreno desconocido pero fascinante.

Después entregate. No te queda otra. Y hacelo sin temor, ni preocupación. Estos tipos te van a secuestrar durante un par de horas de todo lo que ya viste y escuchaste. Te van a tirar el salvavidas para rescatarte de la rutina, de las preocupaciones y de las responsabilidades. Te van a mostrar un mundo diferente. Y cuando digo esto último, lo digo en forma literal. Porque hace más de tres décadas atrás, el mundo era un lugar muy distinto y estas eran unas de las bestias que lo dominaban. Y te están invitando a presenciar la forma más elegante de abandonar el trono. Con grandeza, dignidad y honor.

Me olvidaba, estoy hablando de The Last Waltz, el recital despedida de The Band, filmado por Martin Scorssese. ¿Te parece poco, o ya entendiste?

martes, 1 de julio de 2008

POLITICOS

Las mismas caras todos los días, desde siempre
Políticos, incansables parásitos, demonios
Burocráticos enemigos del pueblo, seres sin patria
Sin vergüenza ni bandera
Hombres y mujeres imposibles de respetar,
Hombres y mujeres sin honor
Cobardes esclavos de sus transas
Gurkas dispuestos a venderse a cualquier precio

Qué estás esperando para gritarles en la cara?
Qué estás esperando para dejarlos sin palabras?
O es que te tienen demasiado entretenido?
Demasiado sedado, demasiado dormido?

Se visten con sus trajes y se arreglan el pelo, con tu plata
Se cambian los dientes y se ponen nuevas teas, con tu plata
Comen en Puerto Madero y cagan en sus pisos que alquilan con tu plata
Y con tu plata no hacen nada de lo bueno que deberían hacer

Sienten y piensan como dioses de alguna fábula maldita
No asumen sus responsabilidades
Y tienen lenguas veloces para la mentira y la excusa
Ciegos de la obvia realidad, voraces comerciantes de la esperanza
Los políticos son la porción más vergonzosa de la democracia
Son la inspiración más indicada y el nutriente más efectivo
Para los viejos amantes de la nefasta historia pasada

Qué están esperando para llenarse de gloria?
Qué están esperando para alcanzar la victoria?
O es que están demasiado mal acostumbrados?
Demasiado gordos, demasiado confiados?