domingo, 17 de enero de 2010

LOS DUEÑOS DE LA NOCHE

Ultimamente, cuando me acuesto, no puedo dormirme
Cierro los ojos y trato de relajarme, sin embargo,
el sueño no llega
Es que me concentro demasiado en mi corazón, y temo
que se detenga en medio de la noche
como esos autos que de repente y sin aviso,
dejan de funcionar
Pero mi cabeza tampoco ayuda
La noche es tan espesa en mi habitación, tan negra
Es casi como una muralla, o una caja hermética
Una dimensión distinta, un universo nuevo
Y cada vez que abro los ojos, allí están ellos,
los dueños de la noche
Con sus caras deformes y sus bocas abiertas
observando la frustración de mi sueño imposible
riendo como una horda de retardados enfurecidos
“Hijos de puta, váyanse”, pienso y suplico
mientras los miro a los ojos tratando de intimidarlos
Estimo que ellos me conocen bien, en detalle
Porque finalmente acabo rendido,
entregándome como en un sacrificio pagano
cansado de ofrecer resistencia
Y supongo que se aprovechan de mi estado de inconciencia
Que me huelen como bestias, que me tocan
Que examinan mis restos aturdidos, que gozan
Me los imagino bailando a mi alrededor
Como chamanes frente a la hoguera
Al ritmo de mi respiración,
Aprovechando cada segundo, enemigos del sol
Haciéndome girar en la cama, bañándome en sudor
¿Será por eso que me despierto tan cansado,
con ganas de seguir durmiendo?
Y los días se hacen interminables y trato de no pensar
Me repito una y otra vez como en la canción de los Rolling, que
“es solo mi imaginación”, pero no logro convencerme hasta los huesos
Porque la noche llega otra vez y otra vez ahí estoy,
Con mi corazón sobresaltado y tenso
Esperando nuevamente que las sombras, me vomiten en la cara

No hay comentarios: